Elegir la cama adecuada es fundamental, ya que influye enormemente en la calidad de nuestro sueño. Como es sabido, nos pasamos un tercio de nuestra vida en la cama, así que es importantísimo garantizar que sea cómoda para nosotros y para nuestros hijos. Muchos padres se enfrentan a una decisión complicada cuando han de comprar la cama para su criatura.

A la hora de adquirir una cama, lo primero que hay que comprobar es la calidad de fabricación y el tipo de colchón sobre el que vayan a dormir nuestros hijos. En las habitaciones más pequeñas, las camas individuales son perfectas. Una cama individual que se puede destacar es la Billy. Se trata de una cama infantil hecha de madera maciza de pino de alta calidad. Una de sus grandes ventajas es que tiene los bordes redondeados, lo que la convierte en una cama muy segura. Además, se pueden usar colchones de entre 10 y 12 cm de grosor. La cama posee el certificado FSC.

Otro tipo de cama para niños es la Cami. Al igual que la anterior, se fabrica con madera de pino. Cuenta con barandillas laterales que impiden que el niño se caiga. Se puede comprar en cinco tipos distintos, por eso queda genial tanto en las habitaciones grandes como en las pequeñas. La cama para niños Cami contiene cajones en los que se puede guardar la ropa de cama. Para fabricar la cama individual Miki se utiliza tanto madera como tableros. Su entrada es universal, lo que significa que se puede colocar tanto a la izquierda como a la derecha. Todos sus elementos son ecológicos y antialérgicos. Además, su bajo precio es una ventaja enorme. Se puede instalar en la habitación de niños y adolescentes. Actualmente, la cama individual infantil Timon S goza de una gran popularidad. Se trata de un producto de gran calidad hecho de madera de pino. Además, posee una barandilla de 68 cm de largo. El somier está hecho de contrachapado y es increíblemente resistente (150 kg). Os animamos a echar un vistazo al amplio catálogo del fabricante.