Organizar una habitación para un recién nacido - equipo básico

Al organizar la habitación de un bebé, recuerda una cosa fundamental: la habitación de un bebé no es solo un lugar dedicado para el bebé, sino también para los padres, porque como padre pasarás muchas horas con tu bebé en la habitación del bebé en su primera año de vida Dos reglas de oro se derivan de esto:

1. Hay que ver la habitación del niño a través de los ojos de un recién nacido.
2. Debe diseñar la habitación, al menos parcialmente, de acuerdo con sus necesidades y deseos personales, para que pueda pasar este tiempo con su hijo de una manera cómoda y acogedora. Si eres feliz, tu hijo también lo será.

Al organizar una habitación para un recién nacido, primero debe abordar el tema de manera casual y no apresurarse con las compras, sino considerar bien lo que realmente necesitará. (Depende de su situación de vivienda y cuántos hermanos o hermanas ya pueden estar en la habitación). Muchas cosas encajan una vez que llega el bebé.

Ideas para decorar la habitación de un bebé

Los colores de las paredes - consejos

Los mejores colores de pared para la habitación de un bebé son colores armoniosos y suaves porque transmiten un ambiente tranquilo, que también es un factor importante para el sueño. Por eso, a la hora de decorar la habitación de un bebé, primero se debe elegir un color base suave (blanco, gris claro, beige, crema, etc.), luego elegir algunas tonalidades más llamativas para agregar luego en forma de acentos de color. Hay que tener en cuenta que los niños muy pequeños solo pueden distinguir contrastes cromáticos muy fuertes, como el blanco-negro o el crema-azul oscuro. Por lo tanto, los accesorios pueden ser de colores o tener patrones con contrastes. En general, sin embargo, se recomienda limitarse a un máximo de tres colores.

Muebles y complementos para la habitación de un recién nacido

¿Qué muebles se necesitan para la habitación de un recién nacido? Una habitación para bebés bien diseñada consta de una cuna y/o cuna/canasta, un cambiador y, posiblemente, un armario. Una cama auxiliar para los padres también es una buena solución, porque los padres siempre quieren tener cerca a su hijo, sobre todo al principio.

Un cambiador bien diseñado debe ser práctico y estar adecuadamente adaptado, porque es un lugar de ternura, mimos, cambio, movimiento de piernas, cuidado del bebé, etc. Por lo tanto, al elegir este mueble para la habitación de un recién nacido, recuerde la seguridad, la comodidad y la higiene. La ropa de recién nacido debe tenerse a mano. También hay que recordar que inicialmente los recién nacidos tienen más ropa para colgar que para colgar. Por eso, en el primer año de vida, una cómoda con función cambiante suele ser suficiente. Así, los cambiadores de madera desmontables resultan muy funcionales y prácticos, ya que de esta forma el cambiador puede transformarse posteriormente en una cómoda.

En el centro de la habitación de un recién nacido siempre hay una cuna o cuna/canasta tejida. La cuna regulable en altura es muy segura y práctica. El mueble clásico y atemporal para el dormitorio de un recién nacido son las camas con escalera de madera, sin decoración, en colores suaves. Una alternativa a la cuna para un recién nacido en el primer año de vida pueden ser las cunas o canastillas, que al ser ligeras se pueden trasladar fácilmente de un punto a otro de la casa. Las camas infantiles con sistema mecedor y/o cajón también son muebles muy populares para los recién nacidos. Cualquier cosa que sea alta y pueda caer es inapropiada. Por lo tanto, todos los estantes deben estar muy cerca del suelo.

A la hora de organizar la habitación de un recién nacido, los complementos adecuados también son muy importantes. Los materiales naturales y de alta calidad juegan un papel importante aquí, ya que los niños comienzan a explorar el mundo a través de la boca desde una edad temprana. La madera y el algodón orgánico son siempre muy buenas opciones. Evita el plástico. La protección adicional contra impactos puede ser, por ejemplo, un protector blando, un parachoques. En el organizador que puedes acoplar a la cuna, puedes guardar un chupete y un mordedor extra. Además, elige un colchón nuevo con una funda de algodón orgánico que tenga las dimensiones exactas de la cuna, de lo contrario, los pies de tu hijo podrían resbalar debajo cuando intente levantarse. Los niños duermen mucho durante el día, por lo que las ventanas deben poder protegerse con cortinas o persianas. En lugar de una luz de techo brillante, use una lámpara de pared con un brillo cálido. Una lámpara de noche relajante junto a la cama aliviará al niño del miedo a la oscuridad. Los bebés pueden cubrirse la cabeza con la manta, por lo que es una buena idea comprar un edredón con cremallera. Cuando el bebé empiece a explorar y quiera darse la vuelta, crea un rincón acogedor para que gatee por el suelo. Haga esto con cobijas suaves para gatear y almohadas coloridas que se pueden usar para gatear, cambiar pañales y conciliar el sueño. En los primeros meses de vida, el bebé no necesita mucho para jugar. Algunos sonajeros, peluches y otros juguetes se pueden guardar en la cesta de mimbre para colocarlos sobre la manta o sobre la colchoneta donde pueda gatear.

Ideas para la habitación de un bebé: ¿qué elementos decorativos son útiles?

Si desea organizar una habitación de bebé hermosa y acogedora, puede introducir un sentimiento de amor y una atmósfera adecuada con accesorios decorativos cuidadosamente seleccionados. Usa telas para crear comodidad. Decora la cama de tu hijo con un bonito dosel de muselina, seda o algodón. Debajo de la cama del niño, coloque una alfombra de algodón suave con forma de nube, sol o animal. Artículos decorativos coloridos, como juguetes colgantes, adornos de pared, banderines, cuadros, cojines elegantes, etc. también son elementos importantes que alegrarán el espacio vital de su hijo y promoverán su desarrollo. Y otra cosa importante: al organizar la habitación de un recién nacido, asegúrese de que no esté demasiado desordenada.