Los mejores colchones para niños - guía

A continuación presentamos algunos consejos fundamentales en cuanto a dureza, dimensiones, material, seguridad y certificaciones a tener en cuenta a la hora de elegir los mejores colchones para un niño.

¿Qué colchón de bebé? Características de los mejores colchones para niños

Grado de dureza

La cuestión clave a la hora de elegir el colchón infantil adecuado es elegir el grado adecuado de firmeza. Los colchones que son demasiado blandos presentan riesgos de asfixia, especialmente para bebés y niños pequeños, y también pueden afectar negativamente el desarrollo de su columna vertebral. Como regla general: para los niños acostados, el colchón no debe hundirse más de 3-4 cm, para los recién nacidos, la cabeza puede hundirse en el colchón un máximo de 2-3 cm. Una dureza media como H3 es generalmente una elección óptima, en ningún caso el colchón debe ser blando, por ejemplo (H1/H2). Elige un colchón infantil de suficiente densidad y grosor. Un niño utiliza la cuna hasta los 15 años, su peso puede aumentar considerablemente durante la pubertad, por lo que recomendamos un modelo con una densidad entre 25 kg/m3 y 28 kg/m3. El grosor adecuado del colchón es de 10, 12 cm. Un modelo más grueso no ofrece comodidad adicional y puede sobresalir más allá del marco de la cama. Sin embargo, por debajo de este espesor sería incómodo y se desgastaría demasiado rápido.

Medidas

El colchón debe ser al menos 20 cm más largo que la altura del niño (10 cm por encima y por debajo). Los tamaños más habituales para bebés y niños pequeños son los colchones infantiles de 60×120 cm hasta una altura máxima de 100 cm (hasta los 3 años aproximadamente) o los colchones infantiles de 70×140 cm hasta una altura máxima de 100 cm (hasta hasta una altura máxima aproximada de 120 cm (hasta unos 6 años). Para niños mayores de 6 años, es posible adquirir un colchón de 90×200 cm.

Certificados de seguridad

Las sustancias nocivas o los blanqueadores ópticos son, por supuesto, inaceptables en los mejores colchones para niños. Solo pruebas y certificados independientes, como el OEKO TEX Standard 100, garantizan la ausencia de sustancias nocivas significativas.

Nota: Al momento de la compra, cada colchón debe estar adecuadamente ventilado para permitir que escapen los compuestos orgánicos (básicamente inofensivos).

Material

Elija colchones hechos con materiales transpirables. Ya sean bebés, niños o adultos, la calidad del sueño siempre será mejor en un colchón de fibras naturales. De hecho, dormir sobre un modelo natural siempre es más saludable que sobre derivados petroquímicos. Elija cuidadosamente los materiales de su colchón en función de sus propiedades naturales antibacterianas y antiácaros. Centrarse en modelos sin tratamiento químico y con certificado Oeko-Tex. La funda del colchón debe ser extraíble y lavable a máquina para garantizar un sueño más saludable todos los días (el lavado regular de la funda es mucho más efectivo y natural que el tratamiento químico contra los ácaros). Ya sea espuma, látex, coco o espuma altamente flexible: hay muchas ventajas y desventajas. En varias pruebas, los colchones para niños hechos de espuma o espuma altamente flexible ganaron muy a menudo. Son transpirables y convencen por su buena elasticidad puntual, bajo bamboleo, buen aislamiento térmico y, en general, buenas propiedades de descanso. Ya sea que su hijo sufra de alergias, asma o simplemente tenga la piel sensible, es importante que duerma con el patrón correcto. En este caso, elige un colchón de bebé hipoalergénico que evitará que tu bebé estornude y ronque durante toda la noche. El modelo hipoalergénico está hecho de espuma o látex, por lo que los ácaros y las bacterias no tienen acceso a él.

Consejos de seguridad: después de la compra, verifique que no haya restos de etiquetas en el colchón y quítelos. Pueden tragarse o, en el peor de los casos, provocar asfixia.

Los mejores colchones para niños según la edad del niño

Una pista importante a la hora de elegir los mejores colchones para niños es la edad del niño.

Si buscas un colchón para los más pequeños (menores de 3 años), te recomendamos un modelo de firmeza media, ya que los niños tienen huesos blandos y elásticos. Por lo tanto, un colchón infantil demasiado duro puede causar molestias cuando el niño duerme y su cuerpo lo sentirá durante años. Muchos médicos creen que un colchón de espuma y viscoelástica son los colchones más recomendados para un recién nacido, porque se adaptan a la forma del cuerpo del bebé y hacen que la columna sensible del bebé permanezca en una posición horizontal cómoda, condición necesaria para mantener la postura correcta del niño. Por ello, este tipo de colchón para niños pequeños también cumple una función preventiva, especialmente en el caso de enfermedades del aparato locomotor.

El colchón adecuado para niños de entre 4 y 5 años, además del colchón de muelles, es el colchón infantil de fibra de coco, que desde hace años es un modelo absolutamente estándar, un verdadero clásico. Sin embargo, su hijo no debe usar este colchón más allá de los 12/13 años. A partir de esta edad, el esqueleto y la musculatura se fortalecen. Muchos niños encontrarán este colchón demasiado firme y necesitarán un colchón con más flexibilidad para la alineación ortopédica de la espalda y los lados del cuerpo.

A la edad de unos 5-8 años, además del colchón de muelles, también recomendamos un colchón infantil de coco y un colchón de látex natural. El primero consiste en una capa de coco altamente flexible. Hasta aproximadamente los 10 años, su hijo dormirá correctamente ortopédicamente en un colchón de coco más firme. Luego utilice un colchón con capas elásticas de látex natural, que brinda soporte plástico al niño en edad escolar y tiene una agradable sensación de profundidad de inmersión. A los 7 años, los huesos de su hijo deben estar protegidos y descansar adecuadamente o se volverán demasiado frágiles. Durante este período de crecimiento, los niños necesitan colchones de muelles. El látex natural hecho de caucho 100% natural es también uno de los mejores materiales para tapicería y ofrece un alto confort para dormir cuando se está acostado. Este material ofrece la mejor ventilación, es más duradero y resistente al desgarro que el látex sintético disponible comercialmente y promueve un clima de sueño muy favorable.

A partir de los 12 años, la altura, el peso y la forma del cuerpo de los niños cambian significativamente. Por lo tanto, ya no se recomiendan los colchones de resortes, sino modelos con una superficie dura y hechos a base de espuma de poliuretano.