La habitación según las reglas del feng shui

Un sueño sano y efectivo es fundamental para que nuestro organismo funcione correctamente. Después de un día lleno de emociones, lo que necesitamos es regenerarnos y descansar para volver a empezar el día siguiente con las pilas cargadas. Arreglar una habitación de manera que sea un lugar cómodo y relajante no es fácil, sobre todo si queremos combinar la funcionalidad con un buen diseño. Si a tu dormitorio le sigue faltando algo para convertirse en ese oasis de paz y no consigues darte cuenta de qué es, no dejes de leer este artículo. Quizás unos pequenos cambios de acuerdo con las normas del feng shui te ayuden a crear un lugar lleno de paz, armonía y energía positiva.

¿Qué es el feng shui?

Es una antigua tradición china según la cual una energía fluye por el ser humano y por el mundo que nos rodea, la cual influye todos los seres vivos. La hipótesis principal de esta teoría es que debemos organizar el espacio en el que vivimos de manera que esa energía pueda fluir con libertad. Para conseguir una armonía absoluta en nuestro hogar, debemos colocar los muebles de manera adecuada y elegir los objetos correctos. El feng shui, también conocido como psicología del espacio, consiste en garantizar que nuestro hogar nos transmita la sensación de seguridad, favorezca el descanso y apoye nuestras fuerzas vitales. Suena un poco magufo, pero si podéis conseguir felicidad y armonía colocando bien los muebles, ¿por qué no ibais a hacerlo?

1.       Orden

El dormitorio no puede estar hecho una leonera, con objetos sueltos por todos los lados y chismes llenando las mesitas y las cómodas. Si de verdad quieres descansar, tienes que ordenar el espacio que te rodea. Por eso lo que hay que hacer es separar y tirar los objetos innecesarios que colman tu dormitorio. Puedes dejar a la vista las cosas más necesarias, pero guarda el resto en cajones y armarios. El simple hecho de poner orden a tu habitación y tirar las cosas innecesarias te hará sentirte mejor. ¿Se descansa o no se descansa mejor en un lugar limpio y ordenado? Pero ojo, siguiendo esta corriente, no puedes usar el espacio debajo de la cama como un lugar para almacenar cajas o tablas de planchar. Según el feng shui, los objetos que se encuentren justo por debajo de tu cama no solo pueden obstaculizar en gran medida el flujo de energía, sino que también pueden repercutir negativamente en tu salud y tu suerte en la vida.

2.       Simetría y pares

Según las normas del feng shui, es beneficioso organizar la habitación de manera que las cosas que incluya vayan en pareja. Nos referimos a los muebles y los objetos más pequenos, como mesitas de noche, lámparas o cuadros. Al feng shui le gusta la simetría, así que recomendamos mantenerla aunque sólo una persona vaya a dormir en la cama. Otra regla importante es que no se pueden colocar objetos como lámparas o cuadros justo por encima de nuestra cabeza. Deben ponerse encima de las mesitas de noche o pender más a un lado. Si la cama que tienes es para dos personas, usa solo un colchón (por lógico que parezca). Últimamente mucha gente compra dos colchones separados para no despertar a su pareja por la noche. Sin embargo, según el feng shui, esta práctica puede ser desastrosa para vuestra relación. Sólo tenéis que elegir un buen colchón en una tienda contrastada. Podéis comprar uno con zonas separadas para que dos personas duerman en él con total comodidad.

3.       Lo más importante es la cama

Tanto el mismo mueble como el lugar en el que se vaya a colocar son fundamentales para que la energía fluya con armonía y vuestro sueño sea más regenerador. Lo ideal es colocar la cama con el cabecero pegado a la pared y con la posibilidad de acceder a ella por ambos lados. Tener la cama en mitad de la habitación o con uno de sus lados pegados a la pared puede repercutir negativamente en vuestro organismo. Al colocar la cama, no peguéis al cabecero a una pared que tenga puertas o ventanas ni la pongáis de manera que las patas apunten a la puerta. Colocar la cama de manera óptima permite adoptar una posición estratégica desde la que se ve todo el espacio. Además, garantiza que el lugar de descanso esté libre de la energía negativa que repercute en nuestro sueño y nuestro estado de ánimo. Según el feng shui, la cama debe tener cabecero sí o sí, ya que proporciona una protección simbólica y crea una sensación de seguridad. La verdad es que razón no le falta, ya que la mayoría de la gente compra camas con cabeceros.

Otra cuestión clave a la hora de elegir la cama según el feng shui es el material del que está hecha. Se desaconseja elegir modelos con muchos elementos de metal, ya que provocan un flujo más rápido de la energía Chi, lo que puede acabar causando problemas de insomnio. La opción más ventajosa es comprar una cama de madera maciza que tenga la forma más sencilla posible. Las camas de madera no sólo son compatibles con la energía, sino que fundamentalmente proceden de la naturaleza, y en el feng shui todo lo natural es más que bienvenido. También es importante que la cama, la ropa de cama y el colchón sean nuevos y que sólo sus dueños los hayan usado. Los objetos tienen la capacidad de acumular energía y conservar las emociones de su dueño durante mucho tiempo, así que apuesta por un mueble que vayas a estrenar.

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